Torreblanca

Guardo muy gratos recuerdos de Torreblanca, el pueblo de mi abuela Josefa Borrás Fabregat, y el de mi padre.


(Sic) Del mar junto a la ribera
Torreblanca, de dos mil
cien almas, ferro-carril
tiene y real carretera.
Los cultivos principales
que existen en sus campiñas
son algarrobos, viñas,
olivos y naranjales.
A Torreblanca dió honor
D. Manuel Vidal, poeta
y lengüista, a quién respeta
la fama por su valor.

Del libro que encontré en el patio de la casa de mi abuela : "La provincia de Castellón de la Plana", libro escrito en verso de D.C.P. de Sillán, 1883.


                   



Tras la conquista por Jaime I, de los castillos de Miravet y Sufera, estos y sus territorios fueron cedidos al prelado tortosino Poncio de Torrella (1213-1254), como gratificación por los servicios prestados. Este obispo repoblo de cristianos todo el territorio donado, que además de los castillos ya citados, comprendian también el castillo de Albalat, el lugar de Cabanes y los de Benlloch. 
En esta donación no aparece el nombre de Torreblanca, pero nombra como uno de los límites la Torre de Luppricato, que por la referencia que se da, puede que sea la actual Torreblanca, la Torre podría estar situada en la iglesia-fortaleza de San Francisco: dado el grosor de sus muros, sus aspilleras a ras del suelo actual, las que coronan el edificio, la barbacana y la puerta de dovelas.






Torreblanca sufrió los avatares de las guerras Carlistas, en mi familia como otras muchas habían de los dos bandos. Mi padre en sus memorias dejó escrito esta historia:

(Sic) ....mi tatarabuelo, D. Antonio Borrás, fue nombrado capitán de infantería el 13 de Septiembre de 1825, según credencial del mismo que obra en mi poder. Como capitán podía ir a caballo al frente de sus tropas, confirmando la historia de la toma de Torreblanca (Castellón) por los isabelinos, que narro a continuación.
No siendo posible repeler el ataque de las tropas isabelinas que estaban a punto de entrar en Torreblanca, contaba mi bisabuelo, que su padre no podía hacerles frente en el pueblo, por las escasas fuerzas de que disponía, por lo tanto ordenó a sus tropas se replegaran hacia Alcalá de Chisvert, mientras él esperaría al enemigo en la plaza y los retendría el tiempo necesario para que no fueran alcanzados.
Montado en su caballo (mi bisabuelo decía que era muy fogoso y blanco) esperó la entrada de las fuerzas isabelinas. El jefe de ellas al ver aquel hermoso corcel tan bien montado, mando hacer alto a los suyos y gallardamente se enfrentó a mi antepasado, se saludaron y desenvainando sus sables se atacaron mutuamente, mi tatarabuelo y el jefe isabelino dieron un espectáculo de buenas maneras, excelente esgrima y dominio de los caballos. 
Las tropas del jefe isabelino veían con asombro aquel combate que se prolongaba bastante sin que ninguno de los contrincantes resultara herido. Mi tatarabuelo cuando creyó que a sus ligeras tropas ya era difícil alcanzarlas espoleó a su caballo e intento zafarse del combate emprendiendo el galope, el caballo al levantar el rabo le fue cercenado por la espada del contrincante. El caballo, al sentirse herido, emprendió alocada carrera dejando pronto el pueblo, pero sin su útil espantamoscas perdido en el combate."





































En sus calles quedan muy pocas casas, que mis recuerdos infantiles hayan guardado en la memoria, recuerdo sus fiestas con sus toros, los "cadafals", la Semana Santa con sus monas, pastissets, y esos encuentros familiares que se hacían eternos, cuando no existía la televisión y las distracciones actuales.











En su calle principal, aún quedan algunos edificios modernistas, típicos de nuestras poblaciones.


La Iglesia parroquial esta bajo la advocación de San Bartolomé, su construccion data del S.XVIII. Es de estilo corintio, sus bóvedas están adornadas con frescos representando pasajes de la vida de san Bartolomé, del pintor valenciano Joaquin Oliet.


En 1397, a finales de agosto, los piratas berberiscos desembarcaron en la costa, asaltando y saqueando la población, de la iglesia se llevaron las alhajas y la Hostia Consagrada con su Custodia. 



Torrenostra es el barrio marítimo de Torreblanca, en 1896 se solicitó de Madrid el permiso para construir un embarcadero para su playa, y en 1935 se solicitó la construcción de un puerto pesquero, ya que faenaban hasta 120 barcas de arrastre y "trasmallo", al no obtener permiso, mi familia como otras de la gente de mar, desilusionadas, emigraron al Grao de Castellón.







Torre vigía de la playa de Torrenostra, data del s. XVII, primitivamente aislada, casi se la han comido los edificios colindantes, otra barbaridad urbanística.


Esta es la llamada Torre de Doña Blanca. Fue propiedad de Tomás Ebri, ciudadano, quién, en 1600, mantuvo pleitos contra el Consell de Torreblanca por razón de los pastos del lugar de Miravet en la documentación de este pleito se constata que la propiedad fue anterior a la repoblación de Torreblanca de 1576.



Ermita del Cristo del Calvario, situada en lo mas alto, creo, de Torreblanca, se accede por el serpenteante camino del bello calvario, que aún se conserva..


No hay comentarios:

Publicar un comentario